Howard Percival Phillips (1923-1969) nació en Santiago de
Chile en el ceno de una familia aristócrata de ascendencia británica. Su padre
era William Phillips, un comerciante porteño descendiente de una larga tradición
de empresarios aduaneros. Se cuenta que los orígenes del clan Phillips se
remontan a la llegada de Sir Willbur Phillips a Valparaíso en 1836 desde el
puerto de Liverpool.
Fue poco antes del nacimiento de Howard que su
padre decidió vender todos sus negocios en Valparaíso para instalarse
definitivamente en una de sus propiedades en Santiago y continuar sus labores
comerciales en diversos negocios de la capital.
Desde pequeño Howard fue criado bajo el sobre-protector
cuidado de su madre y de su autoritario padre. Se cuenta que no conoció más
allá del patio del palacio donde
habitaban en Santiago Centro hasta los nueve años. Su madre lo disuadía
de juntarse con los demás niños del barrio, afirmándole que él era distinto a
ellos, que era superior y los demás no eran más que unos “negros rotos e
incultos”.