Los 10 mejores asesinos ficticios de Chile

1- Dr. Mortis

Un clásico de clásicos, presente en la radio, cómics y hasta la TV fue explotado en todas sus posibles expresiones por el polifacético Juan Marino. La encarnación del mal misma, no se sabe si es un vampiro, o un demonio. Todos los atributos de un científico loco sumándole todas las habilidades sobrenaturales que lo vuelven más invencible y aterrador. Encontrarse con Mortis es casi el equivalente a que el demonio venga a buscar tu alma.

2- Alvaro Rudolphy en Alguien Te Mira

El Rating lo vuelve el más cotizado por las mujeres, esto a pesar de que lo más probable es que una velada con él termine en carnicería. Y no se ilusionen, el selecciona bien a su mujer, debe ser madre soltera, joven, y con buena posición social. Puede que las encuentre "desagradablemente frágiles", pero sin lugar a dudas les robará el corazón.

Un médico psicópata con traumas heredados de los abusos sexuales por parte de su madre. El clásico asesino serial tipo Hannibal Lecter, inteligente, carismático, médico y con problemas sexuales.

3- La Quintrala

Y en pleno Día de la Mujer, el tercer lugar lo ocupa una dama de un carácter único para la época.

Catalina de los Ríos y Lisperguer. Aunque sea un personaje verídico, jamás llegó a causar tanto daño como en la teleserie de chilevisión.

Si bien es cierto que, se casó varias veces, todas por dinero y para luego matar al marido (y claro, lo hacía parecer un accidente), también maltrataba a sus esclavos y practicaba la brujería por su abuela que era una machi indígena. Pelirroja y de ojos verdes, recogió lo mejor de su sangre alemana y amerindia en su belleza.

Nuestra Condesa Báthory, el poder que llegó a acumular sería el equivalente al de la señora K. de hoy en día. Hermosa, poderosa y maquiavélica, ningún hombre en la Colonia se atrevió a levantar la voz en contra los excesos de la Quintrala, y quién lo hacía, sufría las consecuencias.

4- Alfredo Castro en Tony Manero

La multipremiada película de cine de arte, Tony Manero, donde Alfredo Castro se luce como el asesino psicópata obsesionado con el personaje de John Travolta en Tony Manero. Aunque sea feo, pobre, baile mal y tenga impotencia sexual irá sumando más cadáveres a la larga lista de suprimidos de la época de la dictadura militar en que se ambienta la película para alcanzar su máximo objetivo: Ser nombrado por el Festival de la Una (Hola que tal!! FESTIVAL!!! Para los más nostálgicos) como El igualito a Tony Manero ¿Y si le dan el premio a alguien más? Será mejor que rece…

5- Renato Carranza de PDK

Del relato en que se inspira la exitosa novela gráfica nacional PDK, ambos de Jorge Baradit, parte con la historia del incomprendido artista Renato, cuyos crímenes están entre los más horrendos de la historia conocida: Secuestraba niñas menores de doce años a punto de menstruar para destrozarles el vientre y luego arrojar los cadáveres en los lugares más inusitados. Además les escribía en la parte interior del cráneo una palabra del libro que estaba escribiendo. Todo era parte de un ritual mágico-artístico en el que se alimentaba durante nueve meses de los ovarios sin madurar de jóvenes pre-púberes oriundas de puntos mágicos del territorio nacional. Los extraía con sus manos desnudas de las vaginas de las niñas que mantenía distendidas artificialmente con aparatos mecánicos, luego las besaba y abrazaba mientras morían por las hemorragias.

Cuando fue capturado fue sentenciado a tres cadenas perpetuas. Al suicidarse la PDK lo encontró reencarnado en un niño al cual encerraron para cumpliera su segunda cadena.

Nadie pudo comprender jamás su sensibilidad artística

6- Maurice Chobart de "Secuencia Chobart"

Inspirado en la historia real del artista francés Emile Dubois, que ha comienzos del siglo veinte, en Valparaíso, asesinó a cuatro connotados empresarios europeos en Chile. Sus víctimas eran todos usureros, por lo que el pueblo lo convirtió en su suerte de Robin Hood, considerando los asesinatos como actos de justicia del proletariado contra la burguesía. Hoy es todo un mito urbano y un santo popular.

Pero con el Chobart de la novela de Pablo Rumel hay mucho más misterio. No se sabe quién o quiénes son, solo que está inspirado en el artista porteño Dubois. Pintor, excéntrico, femicida y sociópata desaparecido en circunstancias aún inexplicables. Su mundo se caracteriza por una alta dosis de Gore y máquinas sexuales oxidadas. En resumen, un artista mucho más incomprendido que Carranza.

7- El Chacal de Nahueltoro

Campesino autor de los asesinatos más recordados del país. Su fama fue digna de que se realizara una película a fines de los sesentas, de Miguel Littín.

Alcohólico, dependía de la pensión que recibía su pareja, una mujer de 38 años y 5 hijos, para seguir tomando. Cuando no pudo recibir su pensión y, consecuentemente no tuvo dinero para seguir tomando, asesinó a la mujer y a sus cinco hijos, incluyendo a la guagua de pocos meses.

Dentro de la cárcel se rehabilitó y supuestamente se arrepintió de todo lo que hizo, aún así fue fusilado, lo que suscitó una buena polémica en el Chile de entonces.

Alegaba que en el fondo, dada su condición precaria, nunca contó con las herramientas necesarias para tener conciencia de sus actos. En esta línea es célebre su frase de que nunca recibió "enducación de naiden"

Como si no bastara la película hay gente que acude a su tumba a rezarle y a pedirle cosas como si se tratara de un santo.

8- La Chascuda

De los mitos que abundan en el campo, su figura fue recogida en un libro del célebre Baldomero Lillo, además de un telefilm que hizo TVN a principios del milenio.

Los campesinos decían que se movía entre las copas de los árboles. Según la descripción, es un ser con extremidades largas, deforme ya que su rostros es mitad hombre y mitad mujer, del lado masculino sale una melena blanca y lisa, y del lado femenino sale una melena negra, como el pelo de los caballos. Dicen que su cuerpo esta lleno de pelo blanco y rojo. Algunos creen que es un fantasma.

Mucho cuidado para lo viajeros que pasen por la Angostura de la Patagua, porque de allí no van a salir jamás…

9- El Comandante Proxy, también de PDK

¿Un iluminado? ¿Un asesino? ¿Un anarquista esquizoide o un ángel de la redención?

Se mueve entre universos paralelos y entre sus muchos, y aparentemente incoherentes crímenes, están el asesinato de la hija del General Alberto Bachelet en Berlín a fines de los setentas y de un niño llamado Hernán Büchi.

Algunos creen que ni siquiera existe, que no es una persona sino muchas, pero los más entendidos dicen que no se mueve de su cuartel central en un submarino en 1944, en los momentos más críticos de la Segunda Guerra Mundial.

Dice que estamos en guerra, pero no se sabe contra quién. Sus actos terroristas y muertes al azar forman parte de un gran plan que no alcanzamos a entender hasta que llegue el momento final, la hora en que se nos pondrá a todos a prueba…

10- Gloria Münchmeyer, la asesina de Patricia en La Madrastra

Solo fue un asesinato, pero su misterio mantuvo atentos a todos los ingenuos televidentes de la época con cada pista que se iba desvelando en esta, la primera telenovela chilena, y quizás la que marcó más historia.

¿Quién mató a Patricia?... Estrella, el personaje de Gloria Münchmeyer, se supo en las fiestas patrias de 1981 y la gente pudo volver a respirar tranquila.

NOTA: Algunos podrán decir que hay asesinos que no son ficticios y que faltan otros, pero para no entrar en conflictos se tomaron como ficticios a todos aquellos personajes que hayan aparecido en alguna producción literaria o cinematográfica, más allá de sus acciones en la vida real. También se omitieron  a una multitud de personajes que gobernaron Chile durante las décadas de los setentas y ochentas que, si bien son asesinos, llenarían mucho más que este Raking.